Parece que la sociedad nos acaba de descubrir, pero siempre hemos estado aquí y el mundo en que vivimos es tal cual,
gracias en parte a nosotr@s y a nuestras grandes o pequeñas ideas (pero igual de
importantes), que en un momento determinado decidimos apostar por nosotr@s mism@s y abrir un
negocio que nos permita ganarnos el pan de forma independiente, y en la gran
mayoría de los casos, consiguiendo que
otros se lo ganen gracias a nosotr@s.
La "crisis económica", empuja a las nuevas generaciones a emprender, (más por necesidad que por oportunidad) y quizás por esta
razón en los últimos años la "burbuja emprendedora" ha crecido hasta convertirse, no sólo en
una fiebre en busca de la oportunidad,
sino también en una cuestión de Estado.
Y esto produce que en ocasiones halla más gente viviendo a
costa de los emprendedores que emprendiendo realmente.
Cientos de:
- Premios al Emprendimiento.
- Mentores y gurús profesionales.
- Academias y Centros de formación.
- Centros de Incubación de Emprendedores.
- Lanzaderas financiadas por organismos oficiales.
- Centros intensivos patrocinadas por multinacionales
- Desarrollo de ideas promovidas por entidades bancarias.
Y un largo etc. interactúan creando una nueva estructura de responsabilidad
social corporativa.